
Hoy arrancó el juicio contra ex represores del Golpe Militar que nació el 24 de marzo de 1976 para hacerse inmortal. Para no morir jamás en la memoria argentina.
Quería escribir algo sobre este tema en mi blog, pero sin contar lo que se puede encontrar en un libro de historia argentina o en cualquier página de Internet.
El resultado, éste:
Fue hermosa. Te aseguro que fue hermosa.
Estuviste poco con ella y no fue su culpa.
Seguramente no lo recuerdes,
Estuviste poco con ella y no fue su culpa.
Seguramente no lo recuerdes,
pero alguna vez escuchaste su voz.
Sé que te habló una y otra vez cuando no tuvo a nadie para hacerlo,
Sé que te habló una y otra vez cuando no tuvo a nadie para hacerlo,
cuando quiso calmar el dolor.
Alguna vez te miró,
Alguna vez te miró,
y sé que después de mucho tiempo sonrió por primera vez.
Una sonrisa pura y sincera que le emergió del alma.
Fuiste la fuerza, la paz
Fuiste la fuerza, la paz
un pedazo de sol en medio de la noche eterna.
No dejó de cuidarte ni un segundo...
No dejó de cuidarte ni un segundo...
pero peligrosamente te arrebataron de sus manos.
Entre tantos golpes, tus patadas...
Entre tantos golpes, tus patadas...
fueron las únicas que no dolieron,
las únicas que le gustaron,
las únicas que ansió volver a sentir.
Te prometió que todo iba a salir bien,
rezó una y otra vez para poder verte crecer.
Aunque no te pudo ver, te tapó los oídos para que no escucharas.
Aunque no te pudo ver, te tapó los oídos para que no escucharas.
Te tejió tu primer saquito con el alma,
le dibujó mariposas y corazones.
Y entre lágrimas pensó tu nombre.
Y simplemente deseó que fueras feliz.
No estuvo sola.
No estuvo sola.
Vos le diste la fuerza y las ganas.
Un antojo de algo dulce en medio de tanta amargura.
La convertiste en la mujer más linda del mundo en el momento más feo.
Cuántas veces habrá imaginado tu cara,
Cuántas veces habrá imaginado tu cara,
tus manos,
tus ojos.
Te cuidó.
Cuando ya no pudo más, te cuidó.
Por vos, por ella, por tu padre.
Te enseñó que hay que ser fuerte y te dijo "TE AMO" cada vez que se tocó la panza.
Y un día.
De repente.
De la nada,
decidiste salir.
Y ella se olvidó del mundo.
Y ella se olvidó del mundo.
Y ya no tuvo miedo.
Y tus gritos de llanto se volvieron diferentes a esos otros que ya no quería seguir oyendo.
Porque eran dulces,
porque eran calmosos.
Te parió.
Te dio la vida. ´
Te quiso retener.
Pero esas manos perversas,
Pero esas manos perversas,
inhumanas,
te sacaron de ese lugar oscuro y subrepticio y te llevaron a otro.
Y entonces ella suplicó por vos.
Y no dejó de mirarte hasta perderte de vista.
Selló esa imagen en sus retinas y te sacó una foto con el corazón.
¿Sabés qué...?
¿Sabés qué...?
...todavía la tiene.
(A todos los jóvenes que nacieron en un centro clandestino y que fueron brutal y desalmadamente separados de sus madres posteriormente asesinadas).

que triste, pero muy lindo el relato
ResponderEliminarun beso